Existen evidentes paralelismos entre Tosca ‒la apasionada, pero vulnerable diva romana‒ y Maria Callas. “Vissi d’arte” (“Viví para el arte”), la emocionante aria del personaje del Acto II, ha adquirido un especial simbolismo desde la muerte de la soprano en 1977. Tosca fue la última ópera que interpretó Callas en la Royal Opera House, Covent Garden. Supuso para ella un regreso triunfal a los escenarios de ópera tras una ausencia de casi dieciocho meses. Scarpia fue cantado por su adorado colega Tito Gobbi, otro animal escénico nato, y la suntuosa producción fue de Franco Zeffirelli. Como escribió el crítico John Warrack: “En suma, esta fue una de esas preciosas ocasiones en que las dispares partes de una ópera se funden misteriosamente en la experiencia total que siempre estamos esperando”.
Floria Tosca: Maria Callas |
Mario Cavaradossi: Renato Cioni |
Scarpia: Tito Gobbi |
Cesare Angelotti: Victor Godfrey |
Spoletta: Robert Bowman |
Sagrestano: Eric Garrett |
Sciarrone: Denis Wicks |
Un carceriere - Un carcelero: Edgar Boniface |
Un pastore - Un pastor: David Sellar |